martes, 2 de abril de 2019

Peras al vino





La pera la introducen los romanos por el Noreste de la península, iniciando el cultivo en tierras cálidas. Con el paso de los siglos en los nuevos cultivos, se han creado distintas variedades tanto de verano como de invierno. Desde entonces resultan una fruta habitual en la gastronomía de nuestras tierras.

Peras al vino, un postre clásico propio de convento, un buen recurso de invierno con las peras que se guardaban colgadas para mantenerlas como reserva de fruta fresca.

"Tras las peras, vino bebas, y tanto, que las peras anden nadando".


Vamos a fogones:

Ingredientes para 4 comensales:

4 peras de invierno.
Medio litro de vino tinto.
4 cucharadas de azúcar.
La piel de una naranja, solo la parte exterior, no la parte blanca.
Una rama de canela.
Un ramillete de menta.
100 ml de brandy.
Agua para cubrir las peras.


En una olla, ponemos el azúcar hasta caramelizar.
Agregamos el vino y dejamos disolver el azúcar.
Ponemos la rama de canela, la piel de naranja y la menta.
Pelamos las peras y las incorporamos a la olla.
Añadimos agua hasta cubrir las peras.
Dejamos cocer a fuego medio durante 15 minutos.
Añadimos el brandy y damos el punto de azúcar.
Cocinamos otros 3 o 4 minutos o hasta dejarlas al gusto de cocción.
Sacamos las peras y reducimos el almíbar.
Una vez frías servimos con la reducción del almíbar.
Resulta todo un clásico utilizar vino tinto, pero igualmente se puede recurrir a vinos blancos, vinos de Jerez, mistela, Pedro Jiménez, moscatel, malvasía o cava.










No hay comentarios:

Publicar un comentario