martes, 26 de marzo de 2019

Rabo de toro



El rabo de toro estofado, ya era consumido en época de griegos y romanos, llegando a asentarse como una exquisitez en el sur de Andalucía.
Al parecer son los cordobeses los primeros que lo cocinan en la península, siendo el colofón y plato emblema, al reconocimiento de la faena premiada en las corridas de toros. A partir de ahí, el plato se extiende por toda la geografía; llegando a ser cultura.

Vamos a fogones:

Ingredientes para 4 comensales:

Un rabo de toro o ternera de 1,5 kilos.
Una cebolla, 250 g.
Un puerro, 100 g.
Una chirivía, 50 g.
3 zanahorias.
Una punta de apio, 20 g.
4 dientes de ajo.
Una ramita de tomillo y romero.
100 ml de aceite de oliva virgen.
12 granos de pimienta negra.
300 ml de vino tinto.
50 ml de vino Jerez oloroso.
Harina para rebozar el rabo.
Sal y pimienta molida al gusto.

* Actualmente el guiso se enriquece con tomate y pimentón, alimentos que no llegaron a nuestra cultura hasta bien entrado el siglo XVI.


En primer lugar cortamos el rabo por las articulaciones, de este modo se favorece que desprenda más gelatina.
Salpimentemos y enharinamos los trozos de rabo, los freímos hasta dorar y reservamos.
En el aceite restante pochamos las verduras trinchadas junto con las hierbas y especias, manteniéndolas hasta caramelizar y conseguir un dorado intenso.
Añadimos el vino tinto y dejamos reducir a la mitad.
Añadimos dos vasos de agua, y dejamos cocer 15 minutos.
Trituramos el resultado de la cocción y lo pasamos por el chino.
Incorporamos el rabo y cubrimos sobradamente de agua.
Dejamos cocer a fuego lento hasta que la carne quede tierna, pero sin llegar a desprenderse del hueso. Entre tanto iremos espumando y desengrasando el caldo con regularidad.
Añadimos el vino Jerez, damos el punto de sal y rectificamos de acidez con un poco de azúcar, si es preciso.
Reduciremos la salsa hasta que los trozos de carne queden cubiertos por la mitad.
Apartamos la olla, la tapamos y dejamos en reposo para intensificar aromas y sabores. Este tipo de guisos gana en aroma y sabor preparándolo de un día para otro.
Por el método tradicional a fuego lento, se requiere al menos tres horas de cocción.





No hay comentarios:

Publicar un comentario